Parecía imposible, pero ocurrió. Después de ver a un Marilyn Manson que en vez de sus pinturas de guerra mostró su peor cara en la noche del viernes, los cabeza de cartel de la segunda jornada de Kobetasonik, (también yanquis y con el ego por las nubes, ¿coincidencia?), Motley Crue, pifiaron escandalosamente.
Así que el balance final del festival, con los dos buques insignia del cartel dando pena y con la mitad de público que en la primera edición celebrada el pasado año, habrá de ser, lógicamente, negativo.
Se esperaba más asistencia para el sábado y según datos oficiales fueron 15.567 espectadores, 3.000 más que el primer día. Lo que sí hubo fue mejor tiempo y lamentablemente las mismas colas para comprar tickets, para a su vez volver a hacer cola para pillar bebida o un bokata, especialmente caros, además.
En lo musical, el cartel sabatino era más potente, y tras Ekon y Lauren Harris, hubo ya muchos seguidores expectantes para ver el death de God Forbid, el hard de Buckcherry, el ultraveloz power metal de Dragonforce (visto hace unos pocos meses en la Jam) y el nu metal juvenil pero con pegada de Papa Roach.
La entrega siguió en el escenario principal con unos muy enchufados y recuperados Anthrax, con poderoso nuevo cantante y un set clásico que, desde la inicial Indians al agur con I´m The Law, no dio respiro. El thrash vieja escuela brilló con luz propia. Se cayeron a última hora del cartel Thin Lizzy y ocuparon su puesto Lizzy Borden. Heavy clásico, voluntarioso, teatral y hasta verbenero.
Anochecía ya cuando llegó el turno de los suecos In Flames. Su particular y trallero death melódico de hace una década ha evolucionado a una propuesta bastante mas melódica y moderna. Fue una descarga simplemente correcta, sin llegar a romper. El mejor concierto vendría después con Dream Theater. Se podría pensar que tratándose de un festival, los norteamericanos aligerarían algo su exigente metal progresivo para hacer un bolo más accesible. Pues no. Tiraron millas con su propuesta más compleja, elaborada y técnica, dejando al resto de músicos de la jornada como meros principiantes. Instrumentalmente sobresalientes, sonaron tan perfectos como contundentes, y sin concesión alguna. De hecho, su cantante participó menos que nunca y tampoco echaron mano de sus temas más comerciales, que los tienen. Son de otra galaxia, aunque no sean un grupo para las masas.
Después vendría el petardazo Motley Crue. Parecía como si el espíritu Manson de la víspera se hubiera apoderado de los segundos cabeza de cartel, en una especie de competición por saber quien lo hacía peor. Ganó Marilyn, pero por poco. Los Crue, en su debut en Euskadi, arrastraron su nombre de manera tristísima. Y eso que tocaron su mejor repertorio (Kickstart My Heart, Shout At The Devil, Live Wire, Wild Side, Dr Feelgood, Girls, Girls, Girls,…), pero daba igual, porque aquello sonaba como si no se conociesen, y tras la demostración y precisión de Dream Theater, Motley fue un postre difícil de digerir. Desde la primera canción sonaron mal, sin garra, sin potencia, deslavazados. Tras tres temas ya hubo un incomprensible y largísimo solo de guitarra de Mick Mars. El hombre, que casi no puede ni moverse, en la primera mitad del concierto más que tocar metió ruido, pasando de los punteos. Junto a el deambulaban Nikki Sixx (bajo) y Vince Neil (voz), en plan estrella. Al rato el que se quedo a solas, con un cuelgue total, fue el batería Tommy Lee, pero no tocando, ¡hablando y haciendo el mono! Siguió la decadencia hasta que llegó el único bis, la balada Home Sweet Home, con Tommy al piano y la mejor interpretación de todo el show. Y no hubo más.
Como en la víspera con Suicidal Tendencies, el hardcore metalizado sirvió para marcharnos de allí con buen sabor de boca. Los culpables, unos Hatebreed, que, estos si, machacaron a la audiencia sin tregua. ¿Habrá edición 2010?
Interpretes: Motley Crue, Dream Theater, In Flames, Lizzy Borden, Anthrax, Papa Roach, Buckcherry, Dragonforce, Hatebreed, God Forbid, Lauren Harris, Ekon. Fecha: 20 de junio de 2009. Lugar: Kobetamendi, Bilbao. Asistencia: 15.567 personas.
Yo estuve y coincido contigo, menuda cagada de concer…
De los que no se olvidan…
Tenia mucha ilusion por verles y ver un buen espectaculo y a la cuarta cancion nos largamos…Ya estaban acabados…