HORN OF THE RHINO. Crónica y fotos

HORN OF THE RHINO

Fecha: 27 de diciembre de 2014 Lugar: Le Bukowski, Donostia Asistencia: 50 personas Precio: 8/10€

Exceptuando su desapercibido paso por Mogambo hace ya siete años con su segundo disco “Dead Throne Monarch”, HORN OF THE RHINO se presentaban por primera vez en Donostia para atronar Le Bukowski como las aguas torrenciales que muchos sufrimos para llegar hasta el recinto. Única banda de la velada, sin teloneros, el concierto parecía ser arriesgado, pero al menos medio centenar de personas acudieron al lugar para disfrutar del directo de los bilbaínos y no quedaron defraudadas.

Comenzaron con “Exvenhstench”, corte que abre su flamante “Summoning Deliverance”, aunque con un sonido inicial estruendoso, donde el bajo predominaba en exceso. Les siguieron “Grengus” y “High Priest”, los cuales mostraron el amplio rango vocal de Javier Gálvez, que pasaba de los desgarradores gritos guturales a los agudos más limpios con una inmensa facilidad.

Con “Brimston Breath” y “Pile Of Severed Heads” nos introdujo a pasajes más densos y atmosféricos, a la vez que el sonido iba equilibrándose y volviéndose más contundente. Público y banda comenzaron a conectar y, a partir de ese momento, los headbanging y vítores no cesaron hasta el final del concierto. La calidad y precisión mostradas a la hora de ejecutar sus canciones y los ambientes que consiguen evocar mediante ellas son dignos de elogio; es por ello que, tras la friolera de cinco discos, resulta frustrante que la banda todavía no haya recibido el reconocimiento que merece.

“Onward Through Domination”, “Under The Hoof”, “Speaking In Tongues”… sus temas más sólidos sonaron uno tras otro, en una actuación que fue en constante ascenso, adquiriendo un sonido cada vez más nítido y orgánico y, del mismo modo, mostrándose los músicos muy cómodos sobre las tablas. Esto provocó que cuando la banda se despidió definitivamente, tras deleitarnos con las añejas “Standing Ram” y “Temple”, los allí presentes se quedaran con ganas de más, pero a la vez satisfechos por el gran concierto presenciado.

Una pena que, al disponer de un repertorio cada vez más amplio, tengan que descartar y dejar verdaderas joyas fuera del setlist, aunque esto no es más que la muestra de su incontestable calidad. En definitiva, gran ambiente y gran concierto para cerrar el año; esperamos que no tarden tanto en volver por tierras guipuzcoanas y que, cuando lo hagan, sea ante una sala más poblada.

Texto: Mikel Yarza

Fotos: Iñigo Malvido