La venta durante estos primeros meses de preparativos ha sido masiva y ahora mismo sólo quedan los últimos 900 abonos a la venta. Es la primera vez que ocurre con tanta antelación, todo un hito en la historia del festival. Será la edición más grande que jamás se ha realizado y Viveiro se llenará de nuevo de fans de la música.
Este año no habrá entradas físicas y tanto las entradas para los censados en Viveiro como las entradas de días sueltos estarán disponibles en breves.
Tras agotar el Resucamp, se está trabajando duro para que este año, además del Beachcamp y el glamping, haya otra nueva zona de descanso de pago. A su vez, se aumentarán los servicios de la zona de descanso gratuita de siempre y habrá más áreas disponibles.